14 de septiembre de 2008

Jugando a ser Dios

O por lo que parece, a intentarlo. Es lo primero que me viene a la cabeza cuando leo a todas horas noticias sobre el famoso gran colisionador de hadrones a.k.a. gran acelerador de partículas a.k.a LHC que han plantado, literalmente, a 100 metros de profundidad entre Francia y Suiza.

Unos defienden que es totalmente seguro y otros por el contrario comentan que moriremos el pasado día 10 de septiembre. No me quiero posicionar a favor de nadie, pero lo que es seguro es que no estamos muertos, más que nada porque no me pude librar de la reunión de trabajo que tuve el jueves pasado.

(extraida de hipogrifos)

Lo que se pretende con este circulito de 27 km de longitud es recrear los segundos después al famoso Big Bang, es decir, crear un Little Bang y mirar a ver que pasa, a lo mejor se consigue un planeta en pequeñito.

Para muchos científicos esto permitirá saber mucho más sobre el universo y su comportamiento, será el experimento más importante jamás realizado. Algo así como haber estado encerrado en tu casa durante toda tu vida y conseguir abrir la puerta para salir a la calle. Para los jóvenes, la sensación será la misma que el primer día que tus padres te dejaban salir hasta la madrugada con tus colegas.

Sin embargo, para otros será una razón por las que empezar a desestabilizar una religión. Desconozco lo emocionante que puede llegar a ser este reto, pero bajo mi punto de vista, creo que es mucho más interesante investigar por saber que investigar para decirle a tu vecino "payaso, ¿ves como es mentira en lo que creías?". Cada uno que piense y crea lo que quiera.

Confirmar la teoría del Big Bang no va a suponer, ni mucho menos, un golpe para ninguna religión. Es curioso, y mucha gente no sabe, que quien postuló la teoría del Big Bang fue un sacerdote. Por no extenderme incluyo un par de enlaces para quien esté interesado: Teoría del BigBang y Georges Lemaítre.

(extraída de biologaenpotencia)

Realmente jugar a ser dioses no es ninguna novedad. El ser humano es inquieto por naturaleza, le gusta aprender y conocer, aunque muchas veces hemos pensado lo contrario en el colegio.

El ser humano conoce sus limitaciones, experimenta con la imaginación, sueña y se permite el lujo de pronunciar las letras de la palabra "Ojalá". Ojalá volásemos, como Superman, ojalá supiéramos viajar al futuro, o al pasado, como en la máquina del tiempo y derivados, léase regreso al futuro... y así cientos y cientos de deseos plasmados en comics, revistas, películas,..

Ojalá dominase el mundo. Ese deseo pone la piel de gallina. ¿Y qué pretendes hacer con el mundo una vez que lo domines? ¿Jugar como si fuese una casa de muñecas? Te lo pondré fácil: Los Sims.


En este juego tu te creas un usuario a tu imagen y semejanza. Bueno, alguno que otro aprovecha y se quita unos kilillos o unos años, pero el concepto es el mismo, creas tu usuario a tu gusto. Como quien altera los genes de una oveja para que brille en la oscuridad, o quien clona a su perrito muerto como única solución a la depresión por soledad.

¿Quién no se teletransportaría ahora mismo a algún paraíso? Coges, te metes en la cabina, das al botón y en menos de lo que tardas en darte cuenta de que se te olvida el cepillo de dientes ya estás allí. ¿Y esto se puede hacer, existe el teletransporte? Pese a lo que piensa todo el mundo, sí, se puede aunque no de la misma forma que en la peli Jumper.

(Jumper, un ejemplo de teletransporte y de la crisis de guionistas)

Tuve la oportunidad en la Universidad de aprender sobre el teletransporte cuántico, por ahora, se ha realizado con éxito un teletransporte de fotones. Para más información: Teletransporte

Lo que está claro es que no somos superhéroes, aunque lo queramos ser y para poner de nuevo los pies en el suelo propongo este tema de M-Clan:

2 comentarios:

Lhotse dijo...

Siempre hemos jugado a ser dioses, y siempre nos hemos quemado. Parece mentira, pero a parte de todas esas cosas, somos subnormales, porque nunca aprendemos....

Y estos locos...si llega a fallar! ahora estaríamos todos criando malvas.

Fuiks dijo...

Con lo que te gusta la naturaleza que feliz serías tu criando malvas!! :D

Fallamos en el intento, pero aprendemos muchas cosas. Supongo que el dilema está en si merece la pena.

Volvemos a una gran frase: "El fin justifica los medios"

¿Si o no?