18 de mayo de 2010

La importancia de la imaginación

Siempre tuve la idea de que la imaginación es una consecuencia de la imperfección del ser humano.

Es curioso este hecho ya que muchas personas van buscando las fórmulas de lo bello como sinónimo de exactitud y de perfección desde hace mucho tiempo y sin embargo el uso la imaginación es indispensable en la definición de algo perfecto, y como he dicho antes, la imaginación es consecuencia de la imperfección.*

Vayamos poco a poco e ilustrando con algún ejemplo:

La imaginación y la belleza
Cierto día, un ser humano se lió a golpes con una piedra dándole forma. Los golpes eran gobernados por su cabeza y el resultado fue el cuerpo de una mujer, la Venus de Willendorf.

Bien, esta escultura probablemente no representa a ninguna mujer real, pero hay características curiosas. Lo primero es que representa la fertilidad, por las voluminosidades, los pechos grandes, las caderas anchas... etc No da importancia a las extremidades ni a la cara, pero sin embargo el ombligo está tallado, y el pubis exagerado. Es decir que el autor reunió (consciente o inconscientemente) ideas y formó una imagen. La segunda es que el autor volcó esa imagen mental en una piedra y llegó al punto necesario en el que se diferencia una escultura de una simple piedra, buscando fiabilidad, buscando perfección. Usó su imaginación para generar una imagen de lo que pensaba y también para dar forma a una piedra de forma realista.

Otro ejemplo con el cuerpo femenino a día de hoy son las famosas medidas perfectas de la mujer en 1990: 90 - 60 - 90. ¿Y por qué?

Es fácil adivinar que muy pocas mujeres cumplen esta relación de medidas, por no decir ninguna de manera mas o menos continuada. Por otro lado, es una fórmula a la que se llega tras medir el cuerpo de las modelos. Se busca el pecho perfecto, la cintura perfecta y las caderas perfectas, se escoge a las tres ganadoras y se funden en una. El resultado no existe, es imaginario, pero de él se extrae una teoría.

Pero la cosa no queda ahí. Miremos los números de nuevo. Son números "exactos" en el sistema decimal. La exactitud atrae lo mismo que la simetría, que también la cumple. ¿Son estas las medidas perfectas? Por supuesto que no. Una persona con poco pecho y espalda ancha bien puede tener un "pecho perfecto" según esta fórmula. Esta fórmula no es realista porque se olvida de la constitución de la mujer. Define un cuerpo bonito en nuestra imaginación y se olvida de la realidad.


La imaginación y la explicación de la realidad


Demos un paso más al frente sobre la creatividad de las personas. Nos apartamos de el ideal de la perfección y nos centramos más en la imaginación del ser humano para explicar el porqué y el cómo de lo que le rodea.

Un día una persona se despertó y se interesó por el Sol que veía todos los días salir por el horizonte. Se preguntó por qué y obviamente no encontró una respuesta, sin embargo esto no impidió que se dedicase a otras cosas, sino que inventó una explicación. Algo mueve al Sol, yo no lo puedo mover, así que debe ser algo superior a mí, como por ejemplo, un dios. Historias de dioses imperfectos que curiosamente cada uno representaba su perfección particular. Y de ahí generó la perfección de perfecciones, el dios perfecto. Obviamente, producto de la imaginación de nuevo.

Otro ejemplo de hasta donde llega la creatividad humana es la descripción del mundo como un disco. "La Tierra no es más que un disco finito y plano" - hasta aquí bastante realista para la época - "sostenida por cuatro elefantes en sus puntos cardinales y sostenidos estos por una tortuga anciana y grande que nada constantemente en el mar del universo". Hoy en día lo calificaríamos de locura e incluso nos hace reír, pero estoy seguro que actualmente estamos convencidos de barbaridades como estas que tomamos como verdades absolutas, pero que son indemostrables e indefinibles. En un futuro las reduciremos al absurdo.


La imaginación y los miedos


Otro producto de la imaginación son los monstruos, representaciones de nuestros miedos. Normalmente son mezcla de animales conocidos exagerando sus características. Por ejemplo el minotauro es una mezcla entre un humano y un toro. El toro da sensación de poder, de tozudez y de violencia. El humano la da de inteligencia y de habilidad. Si además de esto lo aumentamos de tamaño, el resultado es una imagen terrorífica.

Los dragones suelen ser reptiles, como las serpientes que también imponen respeto al ser humano. Vuelan, y el hombre no, por lo que en el aire el hombre es inferior. Escupen fuego por la boca, teniendo en cuenta que el fuego es una poderosa arma de destrucción. Y por supuesto, son de gran tamaño.

Exactamente igual pasa con los grifos, mezcla del rey del aire (el águila) mezclado con el rey de la selva (el león). Y de la unión entre un grifo y una yegua nacen los hipogrifos.

Sobre las historias que rodean a estos monstruos nos damos cuenta de que hubo personas que se inventaron al más terrorífico de los monstruos para escenificar el miedo y posteriormente se volvieron a usar su creatividad para enmarcarlos en una aventura en la que un héroe les da muerte.

La imaginación y la fantasía

En el lado opuesto a los miedos están los mundos de fantasía o ideales.

El ser humano también ha buscado en la imaginación un mundo en el que no existan los problemas, o, al menos, que te ayuden a solucionarlos. Y ahí es donde aparecen todo tipo de hadas, duendecillos, gnomos que trabajan por las noches en tu taller adelantándote el trabajo (me encantaría seguir creyendo en ellos).

Estos individuos suelen incluirse en cuentos para niños, como los enanitos de Blancanieves o las aventuras de Gulliver. Barrio Sésamo, Isidoro, Inspector Gadget, la televisión continuó con ello.

Llama la atención, tanto en el caso de los miedos como en los de fantasía, que el ser humano no es el único animal con inteligencia suficiente para tener un lenguaje y un comportamiento muy desarrollado. En muchos casos, todas estas especies racionales son capaces de comunicarse entre sí mediante un idioma universal o conociendo a la perfección el idioma de la otra especie (bilingüismo).


La importancia de la creatividad hoy en día



El hombre es curioso por naturaleza. Le llama la atención lo desconocido y le atrae aquello con lo que no está familiarizado. Por eso mucha gente se interesa por historias inventadas, se leen cuentos a los niños e incluso se les invita a creer en ellos.

Sin embargo, no se le ve una aplicación útil directa a la creatividad actualmente. En las escuelas se da más importancia al conocimiento aplicado como la física, las matemáticas, el lenguaje, ... que al desarrollo de la imaginación y cuando llega un soñador como Steve Jobs de Apple con su iPhone o Cameron con su 3D en el cine o leemos la cantidad de ideas que tuvieron Tesla y Da Vinci nos quedamos impresionados y pensamos: "A mí nunca se me ocurriría nada parecido".

"You may say I´m a dreamer, but I´m not the only one." (John Lennon - Imagine)

Los niños nacen con un sentido de la creatividad muy desarrollado. Resuelven sus pequeños problemas con gran astucia e incluso nos impresionan a los adultos. Hay cientos y cientos de anécdotas.

Posiblemente no habría tanta diferencia si se continuase el entrenamiento desde el colegio a los niños en el desarrollo de ideas. Con lo importante que es el Brainstorming hoy en día en cualquier ámbito laboral.

¿Por qué no se fomenta esto desde pequeños? ¿Tendríamos más grandes talentos?

Ni siquiera nos paramos a pensar lo importante que es la imaginación en nuestras vidas y sin embargo, le dedicamos cuatro tiempos verbales que usamos varias veces al día: Condicional de indicativo, condicional perfecto de indicativo y sus correspondientes subjuntivos.

Ken Robinson habló en el programa TED Talks sobre este último apunte: La educación mata la creatividad. Es una charla de 20 minutos bastante agradable por sus toques de humor que he visto en una de las entradas del blog de Berto. Pongo los enlaces con el discurso subtitulado al castellano.







* Definir lo perfecto como "aquello que no es imperfecto". Es un tema tan lioso como interesante y se puede ampliar información con el estudio de los lenguajes formales y los famosos postulados del teorema de completitud de Gödel.

1 comentario:

Lhotse dijo...

Me ha hecho gracia leer hoy el título de tu entrada. Qué sería de un opositor sin imaginación: imaginar que volverá a viajar, a ganar dinero, a tener tiempo para sí mismo, a no dar tanta importancia a cada minuto, a no estar todo el día en la cuerda floja...

Sin la imaginación estaríamos perdidos, es el complemento perfecto para afianzar esa realidad coja.

Me encantó Fuiks...